Madrid ha perdido una gran
            ocasión para organizar los Juegos Olímpicos de 2012, pese a la
            gran calidad de su proyecto, muy superior a los de Paris y Londres,
            la ciudad ganadora.
            El resultado,
            lamentablemente, se veía venir. Hasta poco antes de la votación
            final, el mensaje lanzado por ciertos dirigentes, aunque no exento
            de esperanza, dejaba caer la gran dificultad de que Madrid fuese al
            fin la ciudad elegida.
          
 
          
             
          
          
            Cuando se supo que ZP viajaría
            a Singapur para apoyar en persona la candidatura madrileña, sin
            duda fuimos muchos los que pensamos "la hemos palmado". Y
            es que conociendo la fama de "gafe" del inquilino de la
            Moncloa, ya conocida a nivel internacional, los augurios no podían
            ser peores.
          
          
             
          
          
            Si a lo anterior, unimos
            la pérdida de influencia de España en el mundo, por obra y gracia
            de una política antiamericana, más propia de regímenes banareros
            y tercermundistas que de una democracia occidental, ha ocurrido lo
            que tenía que ocurrir.
          
          
             
          
          
            Lo siento por los madrileños
            y el resto de los españoles sensatos y amantes de su nación,
            porque la organización de los Juegos del 2012 hubiese repercutido
            favorablemente en toda España. Personajes siniestros como Pérez y
            Maragall, - socios de ZP -,que han boicoteado la candidatura madrileña,
            sin duda estarán pletóricos de felicidad por la elección de
            Londres. Bueno, Maragall hubiese preferido Nueva York, pero al menos
            no es Madrid.
          
          
             
          
          
            La conclusión de todo lo
            expuesto, no puede ser otra que ZP es responsable de que Madrid haya
            sido derrotada. Una cosa más que los españoles tenemos que
            "agradecerle" al Presidente por "accidente".
            Y ya van tantas, que la paciencia está a punto de agotarse.