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Ángel Villalba,
secretario regional del PSCL-PSOE. Se le ve con la
pegatina "Archivo de Salamanca". |
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Alfonso Fernández
Mañueco, consejero de
Presidencia, por el PSOE. Se le ve con la pegatina
"Archivo de Salamanca". |
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"Lo que se aprueba aquí
y nada es lo mismo". La frase del portavoz socialista en
las Cortes de Castilla y León, Ángel Villalba, hasta el
momento no rectificada, pronunciada el pasado 18 de mayo en sede
parlamentaria, sólo unos minutos después de la aprobación por
el Congreso de una resolución que abre la posibilidad de
segregación del Archivo de Salamanca, tiene su sentido aunque
resulte malsonante en términos democráticos e intolerable por
su procedencia.
Sólo tres meses antes, el 17
de febrero, el pleno de las Cortes de Castilla y León aprobaba
-por asentimiento- unánimemente una resolución, a instancias
del portavoz popular en Fuensaldaña, en forma de proposición
no de ley (número 128) por la que se instaba al Gobierno de la
Nación que resultara de las elecciones del 14 de marzo a
respetar la unidad del Archivo Histórico de Salamanca,
expresando "la más firme oposición al deseo del Gobierno
de la Generalitat de romper la unidad del Archivo".
El acuerdo fue publicado en el Boletín Oficial de la Cortes
de Castilla y León número 51, de 24 de febrero de 2004, en los
términos que se transcriben a continuación: |
