Gallardon que busca alimentar su "ego", ahora promociona los métodos de muerte entre los niños.


GALLARDON RECETA A LOS MENORES LA PÍLDORA DEL DIA DESPUÉS

 

El Alcalde de Madrid, Sr. Gallardon   dispensará «píldoras del día después», a todas las niñas y jóvenes, comprendidas entre los años 10 y 20, con una receta realizada por un médico, sin necesidad del consentimiento de los padres que estén a cargo de las citadas niñas. Sólo es necesario que las niñas se presenten ante el médico y la soliciten.

El Sr. Gallardon muy propenso a la popularidad, ha tomado una opción realmente peligroso para la Familia, dónde los padres son los responsables de la educación de los hijos y los responsables civiles de lo que sus hijos menores de edad, realicen en la sociedad. Por ejemplo si un niño menor de edad, comete un delito por ejemplo; rotura del mobiliario público, como una farola , los responsables de pagar los desperfectos ocasionados no son los niños, sino los padres. ¿Para unas cosas los niños son "mayorcitos" y para otras dependen de los padres?

La «píldora del día después», es una píldora abortiva, que elimina el óvulo fecundado -la vida humana ya concebida-, del seno materno, provocando un aborto. Además de todas las posibles secuelas que tiene esta píldora al alterar entre otras cosas las hormonas del organismo, puede ocasionar la muerte de la niña, joven o mujer, por sus fuertes efectos secundarios.

El Sr. Gallardon un político sin convicciones claras; más bien, un ideólogo veleta, está realizando una política según el viento y ahora toca tratar a las personas por su sexualidad, reduciendo la dignidad de las personas a sus "órganos sexuales" y para que estos puedan ser desarrollados con total "promiscuidad", se deben de dar las mayores facilidades. Así los jóvenes sólo piensan de cintura para abajo. Y para que no les altere su vida y sus costumbres, el Sr. Gallardon les regalará la «píldora del día después»: "tú formica lo que quieras y con quien te plazca, que con esta píldora no pasa nada". Más de una persona por culpa de esta píldora ha sufrido un infarto cerebral o incluso la muerte.

Para los "políticucho" es más fácil recetar la muerte, que educar personas responsables y con valores.

© Generalísimo Francisco Franco. 28 de Abril de 2.005.


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