Francisco Javier Cavía
Ramos, de 32 años, se había casado
hacía menos de dos años, destinado en Miraflores de la
Sierra desde el año 2002,
pertenecía a la Benemérita desde el año 2000.
Nació en Palencia
en 1973, pero toda su familia vivía
en Valladolid. Javier ha dejado huerfano a un bebé
de seis meses, una de sus máximas ilusiones al que
pensaba pronto dar otro hermano.
Su cuerpo será enterrado hoy en Valladolid.