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Foro Memoria Histórica de la División Azul
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El sábado día 10 de abril tuvo lugar en el
Instituto de Estudios Históricos del CEU en Madrid, las IV Jornadas
de Historia organizadas por “Historia en Libertad”, tratando el tema
“España y la Segunda Guerra Mundial”. Como conferenciantes estuvo
don Fernando Paz, quien trató el tema “El destino de la División
Azul: el frente del Este”; a continuación para terminar la mañana,
la conferencia giró sobre el tema: “Los exiliados frentepopulistas
en los ejércitos aliados (1939-1945)” dirigida por don Carlos
Caballero. Por la tarde el profesor de Historia don Luis Eugenio
Togores habló sobre “Las conspiraciones: juanistas y falangistas
contra la neutralidad, para finalizar las jornadas con la mesa
redonda formada por don Pío Moa y don Manuel Ros, sobre el tema:
“España, Franco y la Segunda Guerra Mundial ¿Prudencia o
estrategia?”
El destino de la División Azul: el frente
del Este
El conferenciante D. Fernando Paz,
profesor de Historia y experto en la Segunda Guerra Mundial, autor
de libros como “Europa bajo los escombros” y numerosos artículos en
diversas publicaciones entre los que podemos encontrar: Dos
dictadores: Stalin y Hitler. Como así son también numerosos sus
trabajos dedicados a la Guerra Civil española.
El profesor Paz Cristóbal a lo largo de su
conferencia analizó de manera detallada, aspectos y peculiaridades
que se dieron durante la Campaña del Este durante la Segunda Guerra
Mundial en la que tuvo su protagonismo muy especial la División
Azul, la cual se puede considerar como la Unidad española con más
entidad propia.
En 1941 se dan en la ofensiva alemana sobre
Rusia, dos características diferenciadoras, mientras que los
sectores Central y Sur se lleva a cabo una campaña completamente
ofensiva en las que las divisiones alemanas avanzan constantemente,
en el sector Norte en el que participa la División el frente es más
estable o estático creándose por ello una labor más defensiva en la
actuación que es indudablemente necesaria pero no tan brillante como
pueda resultar en los otros dos sectores.
En este sector septentrional son frecuentes
los combates cuerpo a cuerpo y hay una carencia importante en cuanto
a la participación de la aviación y de carros de combate.
La División Azul moviliza a unos 45.000
efectivos de los cuales se mantienen en el frente o línea de combate
unos 18.000, siendo por ello una División sobredimensionada respecto
a una División alemana cuyos componentes eran la mitad y por
supuesto esa diferencia se acrecentaba a medida que iba
transcurriendo la guerra.
La división Azul sufrió un 56% de bajas de
todo tipo, lo que nos da una idea de su capacidad de sacrificio.
Pero frente a las 25.000 bajas españolas de los cuales 4.950 fueron
caídos, infringieron a los soviéticos unas 50.000 bajas, cifra
reconocida oficialmente.
La División Azul era una División de
Infantería ordinaria aunque para muchos fue y es considerada una
División de elite debido a su extraordinario comportamiento en el
Frente.
Se produjeron un cierto número de
deserciones, siempre insignificante ya que compuso un porcentaje del
0,2%, que se dio principalmente a partir del segundo relevo hasta el
final de la participación. Evidentemente en gente que no profesaba
ni el sentimiento ni la ideología falangista. |
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El
profesor don Fernando Paz y al fondo don Ángel David |
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Se sabe que los soviéticos, así lo
mencionan ellos mismos, trataban de evitar los sectores que pudieran
tener en frente a los españoles.
Por todos son conocidas las frases de
elogio pronunciadas por Adolfo Hitler: “No he conocido seres más
impávidos ante la muerte”, consideraba que los españoles eran los
únicos europeos de origen Mediterráneo con autentico espíritu o
capacidad de lucha. Solamente a lo largo de su vida tuvo palabras y
muestras de reconocimiento para dos nacionalidades no alemanas con
las que compartían frente de batalla y estas fueron para los
finlandeses y en mayor medida para los españoles, algo muy
significativo teniendo en cuenta la política racial proclamada en
sus postulados.
El Frente del Este se caracterizo por su
extrema dureza, en el que se enfrentaban dos gigantes con ideologías
excluyentes.
Por parte alemana se lleva a cabo la
Operación Barbarroja por unos motivos fundamentales que podríamos
enumerar en:
1.- Obtener un vasto espacio
necesario para el campesinado alemán.
2.- Mantener a los eslavos, pueblos
considerados inferiores, lejos de Europa.
3.- El anticomunismo.
El 22 de junio de 1941 tres millones de
soldados alemanes se enfrentan a cinco millones de soldados
soviéticos.
Se plantea como una campaña de corta
duración, no habiendo en el pensamiento alemán ninguna razón para la
derrota. El Ejército alemán había culminado todas sus campañas hasta
el momento de una manera extraordinaria, el poderoso Ejército
francés el tenido como el mejor del Mundo hasta esa fecha había sido
derrotado en seis semanas. El ejército alemán demostró gozar de una
autentica maestría en el arte de la Guerra.
Desde el verano al otoño de 1941 se había
recorrido los 2/3 del camino hacia la Capital: Moscú.
No dejan de asombrar las victorias, una
tras otra, destacando la de Kiev en la que se infringen al Ejército
soviético 700.000 bajas.
Las causas de la derrota alemana se
podrían enumerar de la siguiente manera:
1.- Rusia era un bocado demasiado
grande demográficamente.
2.- El destino de la Guerra no se
podía decidir en una sola batalla, solamente el 15% del Ejército
alemán estaba mecanizado el resto era hipomóvil.
3.- Se infravaloro la capacidad de
actuación del Ejército Rojo por parte del Alto Estado Mayor
alemán. Todos los estudios para la Campaña se habían concentrado
en un libro que pasó a denominarse El asno rojo o de los
disparates.
4. El enorme desgaste que los
alemanes sufrían día tras día.
5.- El subdesarrollo soviético, la
falta de infraestructuras, caminos, carreteras, vías de
ferrocarril adecuadas, aeropuertos impidió que el despliegue
alemán fuese llevada a cabo convenientemente. Por ejemplo la
mayor parte de los vehículos alemanes eran de ruedas, contándose
con muy pocos los que era de orugas y cuando se contaban con
ellos al contrario que los soviéticos, sus cadenas eran
estrechas.
6.- La falta de previsión para hacer
frente al invierno ruso, no se contaba con ropa adecuada, en el
verano de 1941 se mostró a Hitler un muestrario de quince trajes
debidamente acolchados y acondicionados para hacer frente al
rigor del invierno, lo que no sabía Hitler es que eran los
únicos quince trajes que se habían fabricado. Todo este era el
material con el que se contaba para pertrechar las sesenta
divisiones alemanas que ocupaban el frente ruso.
Los rusos no solo estaban mejor
pertrechados respecto a los alemanes si no que también estaban mejor
aclimatados como era lógico y normal al tratarse de un clima más
familiar y no tan hostil para ellos. Conviene recordar que en los
años 1941 y 1942 se dio un clima excepcionalmente frío para lo que
era siendo habitual en años anteriores.
El ejército soviético era un monstruo sin
cabeza o un gigante con los pies de barro. Los cinco millones de
hombres movilizados se podría sin dificultad multiplicar por cuatro,
llegando a veinte millones.
Rusia contaba con veinte mil blindados
frente a los mil doscientos alemanes, en aquel año a modo de ejemplo
USA contaba con 150 carros operativos.
En aviación ocurría algo parecido los
rusos contaban entre 15.000 y 17.000 aviones frente a los 2.600
alemanes.
Rusia fue la primera en desarrollar las
técnicas del paracaidismo y en 1930 era el Ejército mejor
desarrollado y preparado del Mundo, la invasión alemana sorprendió a
Rusia en una etapa de modernización.
Los alemanes contaban con mayor
experiencia en sus soldados, por el contrario las deficiencias en el
material soviético eran notorias como el no contar con radio los
vehículos blindados, teniendo que recibir las órdenes mediante
señales visuales que hacia el jefe de los carros, por ello una vez
destruido el carro del Comandante en jefe se descabezaba toda la
unidad. Lo mismo ocurría en los aviones, la carencia o falta de
radio, tan fundamental era notoria.
Pero lo más importante fueron las purgas
de 1937 llevadas a cabo por Stalin en 1937, de los cinco mariscales
que contaba por aquel entonces solo salieron indemnes dos.
Stalin creo u Ejército esclerótico,
repudiando un Ejército moderno en favor de uno tradicional.
No centrándose en las tácticas defensivas
solamente en las ofensivas, para él las fronteras de Rusia eran
inviolables.
Stalin pensó que el enfrentamiento con
Alemania era inevitable pero que esta no se produciría hasta 1942,
sus colaboradores que le hicieron ver en el año 1941 la posibilidad
de la invasión alemana en 1941 los califico de agentes provocadores
quitándoselos de en medio. Tampoco descartaba tomar el la ofensiva
contra Alemania y que la podría llevar a cabo en 1942 o 1943 lo más
tardar. Por ello son bastantes los historiadores que piensan que la
invasión por parte de los alemanes fue adelantar lo inevitable que
se hubiera producido más tarde por parte de los soviéticos.
La falta de petróleo de Alemania y la
falta de llamada a la movilización general fueron dos factores que
jugaron también en contra de Alemania. Hitler hasta el año 1943 no
llamo a las mujeres a contribuir a la causa de la guerra, lo veía
contradictorio con su ideario político.
El 4% del armamento soviético procedía de
los aliados occidentales un ejemplo es que de las 2.000 locomotoras
con las que contaban los rusos solamente 19 habían sido fabricadas
en su país.
La retirada continua, al comienzo de la
invasión, por parte de los soviéticos hacia que el tiempo jugase a
su favor, la vasta extensión de territorio hacia que los alemanes se
fuesen consumiendo poco a poco.
Por último y como colofón quiso dejar
patente la frase del General De Gaulle ante la visión que le
proporcionaba las ruinas de la ciudad de Stalin grado. De todas
maneras son un gran pueblo, para ante la pregunta de los allí
presentes, después aclarar: Me estoy refiriendo a los alemanes.
Después vendría el turno de preguntas
ente las que se hicieron:
¿Que importancia pudo tener la politica
llevada a cabo con los pueblos del Este por los alemanes en su
derrota?
El profesor Paz dijo que fue un factor
muy importante, si los alemanes hubieses tratado a los pueblos
eslavos, que los recibían como libertadores, de otra manera, el
sentido de la guerra hubiera tomado quizás otro camino.
¿Cuantos sacerdotes sufrieron las purgas
de Stalin?
Se estima que unos 82.000 fueron muertos,
para que luego durante la guerra se reapertura las iglesias, se
permitiese de nuevo el culto por razones de estado. En algunas
iglesias se celebraron misas a favor del dictador.
¿Como fue la participación española en la
Kriegsmarine?
Se trataba de una comisión que operaba en
el Báltico para poner a prueba las lanchas y motoras que España
había adquirido, que no pasaron de cien sus componentes
Los exiliados frentepopulistas en los
ejércitos aliados (1939-1945)
La segunda conferencia estuvo dirigida
por el Profesor D. Carlos Caballero, experto en la 2ª Guerra
Mundial, autor de libros como "Morir en Rusia", "Escuadrillas azules
en Rusia", "Atlas ilustrado de la División Azul", entre otros
1) Las memorias de
"héroes" (?) republicanos se han desbordado a partir de 2004. Uno,
que es bien pensado, piensa que no tendrá nada que ver ese hecho
(contrastable) con la política del actual gobierno español, de
subvencionar pródigamente (con el dinero de los impuestos) a todos
aquellos que escriban en contra del bando vencedor en la guerra
civil y de sus protagonistas (léase Franco, José Antonio, etc)
2) La hazañas de estos "héroes" son propias de Rambos. La conclusión
que cualquiera puede sacar es que ellos solos ganaron la 2ª Guerra
Mundial a los aliados (ayudados, eso sí, por los ejércitos
soviético, norteamericano, británico y francés).
Pero, curiosamente,
en los cementerios de aquellas grandes batallas en las que
intervinieron heroicamente en vanguardia, no hay tumbas de
españoles. Mi pensamiento (sobradamente conocido en el foro) me
lleva a creer que estos "héroes" eran invulnerables, y por eso no
morían ("a diferencia de los demás mortales", frase que aplicó el Sr
Caldera, ministro del actual presidente del gobierno, refiriéndose a
él).
No hay
prácticamente (y cuando hay son escasos, frente al número total) en
Bir Hakim, ni en la ofensiva contra Paris, ni en Creta, ni en
Narvik, etc.
3) Ejemplos:
En la División
Leclercq, hay escritores que cifran en un "un quinto" el contingente
de españoles. Sobre 15.000 hombres, esto daría 3.000. El capitán
Drohne, jefe de la famosa compañía 9, dice, en cambio, que los
españoles de la división estaban todos en su compañía (con alguna
excepción), y que eran (creo recordar) unos 180.
Es decir, se ha
multiplicado por 20 (un coeficiente multiplicador que suelen aplicar
estos historiadores es el de 10; yo pienso que para no tener que
hacer multiplicaciones "complicadas").
En el ejército soviético hubo pocos españoles encuadrados (según
Carlos, parece ser que Stalin y altas autoridades militares
soviéticas no confiaban en ellos). Estuvieron en la NKVD (precursora
de la KGB), dedicados a la represión en retaguardia. Y otros, como
intérpretes en unidades, y en unidades auxiliares (a éstas se
alistaron muchos para comer, que se estaban muriendo de hambre en
las fábricas, porque sus sueldos eran míseros en aquellos años). Hay
testimonios de españoles residentes en la URSS de aquellos años,
entrevistados por Carlos, que han reconocido que no entraron nunca
en combate.
¿Y qué decir de los tres generales españoles del ejército soviético
(entre ellos, Lister)?. Testigos que escriben sobre aquellos años
dicen que eran los únicos generales in condecoraciones ...porque no
entraron en combate (y esto, conociendo a Líster, sólo puede
explicarse porque el gobierno ruso no confiaba en ellos).
¿Y qué decir de los ciento y pico españoles que pasaron por la
afamada academia militar de Frunze? ¡Ni uno sólo entró en combate!
(seguramente, porque así lo decidió la autoridad soviética).
En Creta, había 70 españoles (¡no un batallón, como cuenta uno de
los panegiristas!) en un regimiento británico de fortificaciones. El
regimiento fue evacuado cuando la invasión alemana de Creta, pero
dejaron a los españoles en tierra. Un oficial, en un acto piadoso,
les recomendó que dijeran a los alemanes que "eran gibraltareños",
para evitar que les trataran como españoles rojos.
4) Esto mismo podría extrapolarse a los "2000 gudaris vascos" (que,
parece ser, fueron 60), a los españoles en Narvik, al español que
dice que estuvo en la vanguardia del desembarco de Normandía, y se
descubre que, efectivamente, su unidad "desembarcó" en Normandía ¡el
5 de agosto de 1944! (dos meses después del desembarcó), o de ese
otro que estuvo en una famosa hazaña en el frente italiano el día
5-6-1944, y en Normandía ...¡al día siguiente!.
5) Hay escritos sobre la contribución de los españoles de Filipinas
a la expulsión de los japoneses (no tuvieron más remedio: los
japoneses consideraban enemigos a todos los occidentales) o de los
que se alistaron en los marines. Estos últimos eran ciudadanos
norteamericanos hijos o nietos de españoles. Es como si consideramos
que fue un "alemán" el que ganó la 2ª Guerra Mundial: Eisenhower,
por ser de ascendencia alemana.
6) Por el contrario, hay citas -con muy mala uva- de la época que
hablan, en las retiradas, de lo expertos que eran los españoles en
ellas (recordando sus retiradas durante la guerra civil, que el
Frente Popular llamaba "maniobras envolventes")
Las
conspiraciones juanistas y falangistas contra la neutralidad
La tercera
conferencia “Las conspiraciones juanistas y falangistas contra la
neutralidad” fue desarrollada por el historiador D. Luis Eugenio
Togores, autor de la trilogía Millán Astray, legionario, Muñoz
Grandes, Héroe de Marruecos, General de la División Azul y
recientemente la biografía del General Yagüe, el general falangista
de Franco. Así mismo entre otras muchas tiene obras sobre el Alcázar
de Toledo y el libro fotográfico de la División Azul.
Principalmente, el
autor identificó a los protagonistas, anglófilos y germanófilos y
todos sus intentos por atraer a Franco a la causa aliada o del Eje.
Unos, evitando la beligerancia española y otros apostando por la
entrada sin ambagajes en la guerra tras la firma del Pacto de Acero
con Alemania.
Destacó que Franco
supo navegar en ese escenario cambiante, compensando en todo momento
las tendencias de unos y otros y demorando deliberadamente los
requerimientos que el propio Hitler mediante carta le exigía para
una respuesta inmediata a su entrada en la guerra.
Trató el tema de la
venta de Wolframio simultáneamente a alemanes y aliados y a los
planes de invasión sobre Portugal, que según él, no dejaron de ser
un ejercicio de Estado Mayor.
Sobre el tema de
los posibles sobornos de los aliados hacia personalidades del
régimen, se mostró escéptico, toda vez que es un tema que no está
totalmente demostrado, poniendo como ejemplo el del General Aranda,
cuyas simpatías hacia los aliados no ocultaba, que sin embargo
siempre llevó una vida austera, incompatible con la fabulosa cifra
de dinero que según algún autor había recibido en un Banco Suizo de
Nueva York.
Sobre las
conspiraciones falangistas restó importancia a la figura de Hedilla,
por su poca ascendencia y capacidad de liderazgo, manteniéndolo en
prisión inicialmente y después ofreciéndole algún puesto de
significación.
Levantó la
carcajada cuando comentó las palabras típicamente cuarteleras de
Franco “debería condecorarle, pero tengo que fusilarlo” refiriéndose
a la condena a muerte al falangista implicado en los “sucesos de
Begoña” tras atentar contra el General Varela.
En definitiva, una
excelente conferencia de Don Luis Eugenio Togores, salpicada de
anécdotas y de detalles poco conocidos, de entre los que destacaría
una frase clarividente del Caudillo en la que afirma “En esta guerra
se enfrentan los “invencibles” contra los “inagotables”. Todo un
reflejo de lo que ocurrió.
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Generalísimo.