INICIO

LIBRO FIRMAS

SUGERENCIAS

Actualizada: 11 de Diciembre de 2.005.  

 
 
Generalísimo.

 

Biografías.


Cronología.


Habla el Caudillo.


Retratos.


Fotos 1.


Fotos 2.


Especial 20N-03.


Especial 20N-04.


Especial 20N-05.


 

Franquismo.

 

Mitos.


Mentiras.


Actos 20N-03.


Actos 20N-04.


Actos 20N-05.


 


Actualidad.

 

Noticias.


Temas varios.


Artículos.


Calendario.


Opinión.


23-F.


Difusión.

 

Música.


Descargas.



Personalidades.

 

Carmen Polo de Franco


L. Carrero Blanco


José Calvo Sotelo


F. Vizcaíno Casas



  Opinión

Catetos.

Jaime L.

Eso son los que utilizan una lengua minoritaria, una lengua supeditada a la lengua común de una Nación, como lo es España en su Constitución, en los Estatutos de cada una de sus Comunidades Autónomas, en la UE, la ONU, la OTAN... Y siento mucho llamar cateto a S.A.R. el Príncipe de Asturias. ¿Qué necesidad hay, siendo una mera cultura regional, de utilizar además, o lo que es peor, por encima de una lengua mayor de todos, una lengua regional? ¿No sería más inteligente, más avanzado, utilizar una lengua con la que nos podemos entender, además de en nuestra casa, en todo el resto de España, y medio mundo más? ¿Por qué centrarnos en un idioma menor cuando podemos entendernos todos en Español sin pelearnos?

Entiendo que quienes sienten su Región como una realidad nacional, como los araneses, (que tratan de ser una Nación con idioma propio dentro de Cataluña y el catalán, por medio del nuevo estatuto que dicha Región quiere aprobar) utilicen el aranés en lugar del Español; España es su enemigo, su opresor. Pero, ¿y los no nacionalistas? Porque hay tanta gente que sin ser independentista utiliza por encima del Español de todos su lengua regional? ¿Por qué esa manía regionalista y pueblerina?

¿Será que España y sus Españoles nos creemos el ombligo del mundo y por eso nos vemos en la necesidad de hacer absurdas distinciones entre nosotros? El mundo es grande, y por ello está dividido en países absolutamente diferenciados, con lenguas propias y nada en común. Pero España, dentro de su realidad nacional, ¡hace lo mismo! Dentro de ella cada uno se coloca en su región natal compitiendo con un mismo Español de otra región, imponiendo cada uno su lengua propia si la tiene o su cultura, siempre muy rica, por encima de la lengua y cultura de todo el país del que todos somos miembros.

Debemos sentirnos orgullosos de hablar uno de los idiomas más ricos y antiguos del mundo, provinente en su mayor parte del todopoderoso latín, cuna de la civilización occidental junto con el griego, con influencias tan enriquecedoras como la resultante de la ocupación árabe de la Península, que ha sido trasladado a medio mundo, y que aumenta (desgraciadamente sólo fuera de nuestras fronteras) año a año. Propongo así mismo que seamos Españoles y sólo Españoles, sobretodo quienes así se sienten por encima de todo, aunque pongan más empeño en defender las glorias de su localidad que las de toda España. Que se deje de ver la Gloriosa Rojigualda como una Bandera política, que se alce por todo aquel que se sienta Español en cualquier contexto y releguemos las enseñas autonómicas a la función que tienen: Representar la unidad de Patria, por debajo siempre de la Madre España.

INICIO


 

© Generalísimo Francisco Franco. Noviembre 2.003 - 2.005. - España -

E-mail: generalisimoffranco@hotmail.com