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Vaya
cruz...
Antonio Quiroga.
Califica
de "luciférica" a la Iglesia Católica la lectora Maria
José Navarro (La Opinión de Málaga, 8-2-2006), por pedir dinero a
favor de los más desfavorecidos, porque según ella, la Iglesia
dispone de "miles de millones". Me gustaría que viera la
nómina que cobran los sacerdotes, el obispo y hasta el déficit del
obispado malagueño el año pasado. A nivel nacional la cosa no varía
demasiado. La absoluta mayoría del dinero disponible es de los
fieles, no del Estado, el cual pretende recortar aún más esa
cantidad porque la iglesia, con la libertad que le debe
caracterizar, se ha opuesto a ciertas promulgaciones legislativas
que van contra el bien social y espiritual.
Ya
María José ha escrito anteriormente contra la visita pastoral del
Papa Benedicto XVI y hacia otros temas sobre el catolicismo de
forma agriamente descalificadora, algo políticamente muy correcto,
por otra parte en España, donde se respetan todas las religiones y
sectas, pero la Iglesia, su labor misionera, humana y espiritual es
atacada con saña desproporcionada. A veces con mala intención,
otras, por desinformación.
En fin, esa es la cruz que nos ha tocado en éste crítico
momento histórico.
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Generalísimo.